Comentario sobre el video referente a "Cómo es la propaganda en una democracia"

La propaganda es la publicidad con un sentido peyorativo. Nos comen los anuncios, nuestra mente está influenciada constantemente, no podemos escapar, nos llenan la vida de cosas o como en una viñeta de Quino, las cosas ocupan toda nuestra vida hasta el punto de que las cosas pasan a ser nuestra vida. Las empresas hacen muy bien su trabajo, su trabajo no es otro que intentar comernos el coco, no nos engañemos, es con lo que hacen dinero, nadie les puede reprochar nada.
La mayoría de nosotros trabajamos en empresas y los que no lo hacen, trabajan en el Estado que a su vez es pagado por impuestos que pagan empresas e impuestos que pagan trabajadores porque se lo pagan las empresas. Vivimos de las empresas y las empresas nos comen la vida. Seamos francos, sino queremos entrar en el juego, es sencillo, nos vamos a vivir al desierto. Quien no compra nada o incluso quien no vende nada, empezando porque todos vendemos nuestro trabajo a cambio de un salario y sino somos tontos intentamos hacer propaganda de nuestro trabajo aunque solo sea en el currículum.
La propaganda está ahí, nosotros somos dueños de que no nos mientan, de hacerla caso solo cuando la necesitamos, de apagar y encender la televisión cuando hay anuncios o de no ver ni pulsar el banner de turno. Somos libres de no hacerla caso, de descubrir sus enrevesados vericuetos que intentan impulsarnos al borde del precipicio de la compra.
Respecto de la propaganda política, señores y señoras no tengo más que decir que, por favor, léanse los programas de los partidos políticos y voten en consonancia, y luego, a posteriori, si el partido no hace lo que dice, no le voten. Y no les importe votar a un partido minoritario porque su voto parezca que no vaya a servir para nada, porque sí que sirve. Sirve para que cuando haya personas que no les interesa ningún partido, puedan formar el suyo con otras ideas.
Publicado por Pedro Javier Martínez López.